sábado, 22 de mayo de 2010

Esta eres tú

Hoy me atrevo a escribirte de nuevo.
Hoy voy a decirte lo que nunca en la vida he logrado contarte, eso que me haces sentir.
Me encanta cuando te levantas de repente después de haberte caído y, rodeándote para observar el lugar donde caíste, sonríes cabizbaja, y entonces piensas “¿Lo ves? Siempre es posible”. Y aparentemente segura, pero interiormente temerosa, sigues adelante apaciblemente. Y mientras caminas, de vez en cuando vuelves a ese mundo interior tuyo en el que te sumerges para aislarte de los rayos de dolor. En ese mundo eres tú la reina de todo color, de toda felicidad. Miras las nubes que parecen de pegatina en ese azul tan azul. Inspiras hasta las profundidades de tu alma el olor a pan que te embriaga cada mañana en la plaza donde los niños juegan a hacer pompas de jabón y disfrutas viéndote reflejada a ti y al mundo en esa pequeña –pero tan grande para ti- burbuja, con pequitas de colores que llenan tu mirada de luz. Me encanta también cuando tu mirada busca desesperadamente sonrisas. Todo tipo de sonrisas. Y a duras penas encuentra alguna que sea verdadera entre la multitud. Y después la dejas porque ni siquiera te llena. Entonces piensas “voy a comprar sonrisas”, porque necesitas sentir el mundo un poquito más bueno que ayer. Pero ahora ya has aprendido que con tu sonrisa te basta para vivir, y eso también me encanta.

Además, tengo el gusto de confesarte que es tremendamente genial cuando intentas escribir algo bueno, o “simplemente algo malo, ¡joder!”, y resoplas con el corazón cansado porque no logran salirte las palabras, porque ya no consigues encontrar sentimientos que al plasmarlos te hagan sentir bien. Y me gusta porque sé que eres tú la que estás escribiendo todo esto con el corazón sobre la mesa, con esos ojos casi desbordados de sus órbitas buscando desesperada y descubriendo en él sensaciones y sentimientos nuevos dentro de los cajones que compras cada fin de mes con el fin de estar preparada por si logras encontrar nuevas emociones. Estás aquí quitando de él los alfileres que te hacen sangrar cada noche en silencio y plasmándolo todo en este pequeño lugar de tu mundo perfecto, especial, ideal, enigmático. En este lugar tan tuyo, tan... tan tú.

Y esta eres tú. La que perdida y rodeada de tanta gente no ve a nadie y se pregunta dónde está, y de repente echa a correr como una niña pequeña en busca de algo que le haga sonreír. La que los domingos por la tarde arranca histérica sólo para calmar el dolor que le produce la soledad los post-its de colores con mensajes de felicidad que los lunes por la mañana pega en la pared de su habitación entusiasmada por volver a empezar. La que aún recuerda el lugar perfecto para gritar y cierra los ojos imaginando estar ahí. La que cuando no consigue gritar coge la cámara y captura el mundo con el disparador del corazón. La que quiere arañar y arrancar de este mundo la inmundicia que se filtra tan fácilmente en las cabezas de la gente. La que sueña pesadillas, la que escupe promesas que alguien le introdujo en la boca haciéndole callar, la que camina sobre cristales rotos, la que duerme a los pies de la cama, la que cose cremalleras en lugar de poner tiritas en su corazón, la que en lugar de beber el agua, la muerde… pero aún así se ríe de ella; pero aún así sonríe, porque es feliz.

10 comentarios:

rOo RAMONE dijo...

Gracias por volver,
GIGANTE!

Un beso princesa.

Sandra dijo...

Otro para ti, ¡guapa!

Siempre vuelvo :)

Fernando Gili dijo...

Escribe usted muy, pero que muy, bien. Felicidades.
Siempre suyo
Un completo gilipollas

Custardoy dijo...

¿Esta eres tu?...

Anónimo dijo...

Ahh que bonito

^^

Sale me retiro, cuidate

:D

xispy dijo...

preciso cada letra, cada palabra un sentimiento una senscion que cautiva!! me encanta!!!

Brokenwings dijo...

en ocasiones cuesta definir a la gente... supongo que al final sólo hay que contar la verdad...

Aitor Gube dijo...

Que gran persona describes, precioso :)
bonito blog!
Saludos

Alba FS dijo...

Pues me encanta cómo se toma la vida. O como te la tomas tú, ¿cómo prefieres que lo diga? ;)
Es increíble.

Salta por mi ventana. ¡Valiente! dijo...

He leido muchas entrada tuyas, tendría que comentar en todas porque todas me encantan, de hecho comentaré más amenudo... pero esta me puso los pelos de punta, me sobrecogió el corazón y me hizo sonreír desde dentro. Amo a esas personas. Adoro esa forma de expresar el lenguaje del corazón que tienes.
Sigue siendo extraordinaria (: