- ¿Te cuento un secreto? – Vega le susurra al oído.
- ¡Vale!
- ¿Sabías que las estrellas se mueven a una velocidad tan rápida que a la enorme distancia de La Tierra parece que permanezcan fijas? Sólo percibimos sus cambios de posición a través de los siglos. Así que nunca podremos ver su movimiento porque, para cuando eso suceda, ya no estaremos aquí.
- Vaya... qué rabia. Yo quiero ver cómo se mueven, ¡no es justo!
- Tú volarás hacia el Universo, ya lo verás. Entonces sabrás cómo cambian de lugar las estrellas.
- ¿Yo seré una estrella cuando muera? – dice sorprendido.
- Ya lo eres, desde que apareciste en este mundo.
- ¡Vale!
- ¿Sabías que las estrellas se mueven a una velocidad tan rápida que a la enorme distancia de La Tierra parece que permanezcan fijas? Sólo percibimos sus cambios de posición a través de los siglos. Así que nunca podremos ver su movimiento porque, para cuando eso suceda, ya no estaremos aquí.
- Vaya... qué rabia. Yo quiero ver cómo se mueven, ¡no es justo!
- Tú volarás hacia el Universo, ya lo verás. Entonces sabrás cómo cambian de lugar las estrellas.
- ¿Yo seré una estrella cuando muera? – dice sorprendido.
- Ya lo eres, desde que apareciste en este mundo.
3 comentarios:
Yo quiero ser de viento.
¡Hola! ¿Esto es un fragmento de un libro? ¿De qué autor? ¿O lo has escrito tú? Me ha parecido precioso... Un saludo desde literatura a la parrilla (http://parrilladeliteratura.blogspot.com)
Pues que bendición estar en este mundo y que bendición que una estrella me trajo hasta aquí.
Te dejo una constelación de besos :)
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